Se han detectado una escalada de estafas relacionadas con facturas legítimas emitidas por proveedores que llegan a nuestro correo con los datos bancarios de pago modificados, siendo estos sustituidos por los de los ciberdelincuentes. No hay ningún tipo de indicio que nos haga sospechar de la veracidad de estos datos, como si pasa es correos falsos y suplantaciones de identidad.
Para lograr esto los estafadores usan varias técnicas de pirateo informático, siendo las más habituales el haber conseguido la contraseña del email de emisor o el receptor del email.
Para ellos usan una técnica denominada “Phishing” mediante la cual y usando mensajes de correo electrónico incitan a los usuarios a introducir sus datos de acceso a sus cuentas de email en falsas webs que simulan a las de sus proveedores de correo electrónico. Todo ello con el pretexto de que su cuenta está bloqueada, o debe validar su contraseña.
Le recomendamos que:
-Cambie la contraseña de su correo electrónico de forma periódica.
-Valide siempre la cuenta bancaria de pago de su proveedor.
-No abra archivos adjuntos ni pinche en enlaces que le lleguen por email, si no está 100% seguro de su origen y legitimidad.
-Antes de abrir un correo lea atentamente la dirección desde donde se lo envían (es común falsificar direcciones incluyendo pequeños cambios para inducir al engaño)
Contra el engaño la única herramienta válida es la precaución, ya que los antivirus y herramientas de seguridad informática que tanto nos protegen, poco o nada pueden hacer en este caso.